martes, 21 de mayo de 2013


LEOPOLDO ALBERTO PRIETO

No sé si os puede servir mi experiencia.

 Aunque llevo ya unos años en la fotografía no es hasta hace poco cuando me lo estoy planteando como freelance. He trabajado en un periódico de provincia durante bastantes años hasta su cierre; y paralelamente a esto y en mis vacaciones he realizado reportajes en comunidades y países en vías de desarrollo, en posguerras, desastres naturales o nucleares, etc: Afganistán, Irak, Kosovo, R.D. Congo, Liberia, Sierra Leona, Guinea Bissau...
Recientemente y ya como freelance he hecho trabajos como El mar de Aral o la guerra de Siria. 
En mi opinión ser freelance es una de las posibilidades que tenemos ahora dada la difícil situación en que se encuentra el periodismo a nivel mundial y en España más especialmente.
 Aunque tiene algo muy interesante como es el poder abordar los temas como, cuando y durante el tiempo que nos apetece también es muy incierta. Es importante saber que quien da este paso para comenzar un proyecto debe adelantar todos los gastos relativos a viajes, seguros, fixers (traductores, expertos locales gestores, 'conseguidores' de entrevistas y otras cosas, etc.), alojamiento, comida, equipo y otros.
Y luego está el tema de la comercialización del trabajo: no es nada fácil encontrar a una agencia, periódico, revista o publicación web dispuesta a pagar por el trabajo que hemos hecho. Y si estuvieran interesados no es fácil que con el pago por el mismo podamos cubrir los gastos realizados para poder cubrir el reportaje que estamos haciendo (y menos aún para poder cubrir parte del siguiente -aquí si no vendes no cobras-).  
Parte de mi trabajo, el más reciente hecho en Líbano y Siria se puede ver en mi web     www.albertoprieto.org
El futuro lo veo muy incierto para los periodistas, en especial para los freelance hasta que la prensa no solucione los graves problemas actuales de financiación y los nuevos modelos de periodismo digital encuentren el camino de la viabilidad económica y puedan así pagar dignamente a los profesionales, en plantilla o no, freelances o no.
Otro problema añadido que ocurre en Especial en España es que muchas publicaciones, no solo están deshaciéndose de sus trabajadores y colaboradores sino que ya llevan tiempo cogiendo fotos -y textos- de blogs, webs y otras fuentes en general poco fiables para ahorrar; y muchos futuros periodistas se dan por satisfechos con ver sus fotos o textos publicados -a menudo sin firmar ni siquiera- sin remuneración alguna, algo que daña mucho la profesión y la somete a una situación difícil de revertir.
Debemos cobrar por un trabajo profesional. Debemos dignificar la profesión. Debemos ser críticos y no aguantar trabajar al dictado de nadie ni soportar presiones ni consignas que vayan en contra de lo que creamos no ético o injusto.

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